AMBIENTE
Alianza para promover un transporte aéreo más sostenible en Colombia
Acuerdo entre LATAM Airlines y Fedepalma para trabajar en el uso de combustibles sostenibles en la aviación. La articulación entre el sector aéreo y el agro puede abrir un camino hacia un futuro más limpio, competitivo y con soluciones locales.
En un contexto donde el mundo avanza hacia soluciones energéticas más limpias y sostenibles, Colombia dio un paso significativo con la firma de un acuerdo entre LATAM Airlines Colombia y la Federación Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite (Fedepalma).
Esta alianza, formalizada en el marco de la Feria Internacional Aeronáutica y Espacial F-Air 2025, realizada en Medellín, busca promover y consolidar el desarrollo del combustible sostenible de aviación (SAF, por sus siglas en inglés), producido a partir de materias primas como la palma de aceite colombiana.
El convenio, que tendrá vigencia de cinco años, establece una hoja de ruta colaborativa para que el SAF sea una realidad en el país. Ambas organizaciones se comprometieron a impulsar proyectos conjuntos que resalten el potencial de Colombia en la producción de este biocombustible, garantizando criterios de sostenibilidad, trazabilidad y viabilidad económica.
Entre las acciones previstas se incluyen la participación en eventos especializados, el diseño de espacios de formación para tomadores de decisión, visitas técnicas y la generación de contenidos educativos y de divulgación.
Desde LATAM, María Lara, gerente de Asuntos Corporativos, destacó que la transición energética en la aviación requiere de alianzas estratégicas y de una visión compartida entre sectores productivos. Por su parte, Andrés Felipe García, director de Sostenibilidad de Fedepalma, señaló que la palma colombiana tiene un alto potencial para aportar a la transformación energética de la aviación, fortaleciendo al mismo tiempo el agro nacional.
El desarrollo del SAF representa no solo una oportunidad ambiental al reducir emisiones, sino también económica y social. La palmicultura en Colombia genera más de 233.000 empleos formales y el 99 % de sus cultivos están libres de deforestación, lo que convierte al país en referente internacional de producción sostenible. Empresas como GREMCA ya han obtenido certificaciones internacionales, como CORSIA, que avalan el cumplimiento de altos estándares ambientales y sociales.
LATAM, pionera en la región en el uso de biocombustibles, ha realizado importantes avances en esta materia, entre ellos más de 700 vuelos domésticos operados con Jet A1 coprocesado con materias primas renovables. Además, la aerolínea participó en la construcción de la hoja de ruta nacional para el SAF, aportando conocimientos técnicos y proyecciones de demanda.
En octubre, mes en el que se resaltan iniciativas que promueven la sostenibilidad, esta alianza se convierte en un hito para Colombia, al demostrar que la articulación entre el sector aéreo y el agro puede trazar un camino hacia un futuro más limpio, competitivo y con soluciones locales que beneficien a toda la región.
Frenan relleno ilegal en predio agrícola de Cogua
Las denuncias de la comunidad alertaron sobre movimientos de tierra que no contaban con autorización ambiental. La CAR suspendió las actividades de relleno con residuos de construcción y demolición por afectación al suelo y el agua.
Un preocupante daño ambiental se registra en el municipio de Cogua, Cundinamarca, donde la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) detectó y suspendió un relleno ilegal que se estaba formando en la vereda Casa Blanca, lo que generó alarma ciudadana por los riesgos que representa para los recursos naturales y el equilibrio ecológico.
En una inspección realizada por un equipo de profesionales, técnicos y jurídicos de la Regional Sabana Centro de la CAR se constató la disposición de 100 viajes de material de peña o risco de carbón mineral, cada uno con una capacidad cercana a los 12 m2 de desechos utilizados para nivelar el terreno.
La gravedad de la situación no solo radica en el uso de residuos de carbón para modificar la topografía del predio, sino también en la construcción improvisada de un muro de contención hecho con neumáticos usados.
Según explicó Bryan Martínez González, director de la CAR Regional Sabana Centro, esta estructura se desplomó, generando afectaciones inmediatas sobre un drenaje natural que recoge aguas lluvias, situación que aumenta la vulnerabilidad del área frente a procesos de erosión y contaminación de fuentes hídricas.
En este caso, el relleno ilegal representaba una amenaza directa para el equilibrio ecológico de la vereda Casa Blanca y para el bienestar de sus habitantes, por lo que la CAR adoptó medidas preventivas de carácter inmediato. La primera decisión fue la suspensión de todas las actividades que se adelantaban en el predio.
Posteriormente, se ordenó el retiro completo del material contaminante y de los neumáticos que habían sido empleados en la construcción del muro, además de exigir la restauración del ecosistema a sus condiciones originales, una tarea que implicará esfuerzos técnicos y económicos importantes. De acuerdo con la CAR, la disposición de carbón y llantas usadas constituye una violación directa a esta norma, razón por la cual se adoptaron las medidas correctivas y preventivas correspondientes.
El caso de Cogua no es aislado. En distintas regiones del departamento se han reportado prácticas similares que reflejan la necesidad de avanzar en procesos de educación ambiental, al tiempo que se fortalecen las sanciones contra quienes insisten en atentar contra el medioambiente.
La utilización de residuos peligrosos como materiales de relleno, aunque pueda representar una solución económica para quienes lo ejecutan, termina generando costos mucho más altos en términos de salud pública, restauración de ecosistemas y afectación de la biodiversidad.
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