Un alcalde ‘desconectado’ 19/10/2022
Desconectado
Por El Observador

A 15 meses de terminar su gobierno, los cajiqueños reclaman de Fabio Ramírez Rodríguez no solo que atienda sus apremiantes problemas, sino que rinda cuentas sobre lo realizado en los tres años que lleva frente a la Alcaldía.

Aun año de la elección de un nuevo alcalde para Cajicá, la ciudadanía pregunta insistentemente sobre los resultados de la gestión del actual mandatario municipal, Fabio Ramírez Rodríguez, a quien le quedan escasos 15 meses para terminar su mandato. La gente está reclamando una rendición de cuentas de lo que ha hecho en casi tres años de gobierno.

Pese a que la Constitución Política establece que los gobernantes deben entregar cuentas periódicas a los ciudadanos de su gestión, Ramírez Rodríguez en el tiempo que lleva frente a la Alcaldía en pocas oportunidades ha tenido contacto directo con la comunidad y los medios de comunicación, locales y regiones, para informar sobre cómo va el municipio.

La percepción de los cajiqueños es que es un alcalde que permanece refugiado en su despacho o se la pasa viajando mientras los problemas son cada día más preocupantes y visibles en lo social, económico y cultural, sin que la principal autoridad aparezca para poner la cara y responder a los reclamos y anhelos de la ciudadanía.

En el Plan Municipal de Desarrollo (PMD) ‘Cajicá tejiendo futuro, unidos con toda seguridad’, aprobado por el Concejo mediante el Acuerdo 03 de 2020 (sancionado el 2 junio 2020), Ramírez Rodríguez promete en el tema de Seguridad y cultura ciudadana que “el trabajo conjunto con las familias cajiqueñas, nos permitirá fortalecer el tejido social y reconstruir los escenarios familiares, disminuyendo los entornos que incentivan a la criminalidad, el consumo de drogas, el hurto y la violencia intrafamiliar; creando escenarios propicios para una sana convivencia, haciendo de Cajicá con toda seguridad, un mejor lugar”.

Y en otro capítulo del PMD se dice que se “garantizará que todos los ciudadanos tengan acceso en igualdad de oportunidad y calidad a los servicios sociales y se logre un territorio sostenible, gobernable y competitivo, es necesario trabajar arduamente en la solución de nuestros grandes retos. Con toda seguridad queremos servirle al ciudadano, entregándoles a los cajiqueños un municipio seguro, sostenible, con cultura ciudadana, una mayor cobertura de servicios públicos y la puesta en marcha del proyecto de ciudad inteligente”.

Frente a este discurso plasmado en el Plan de Desarrollo, cuyo valor asciende a $ 389.038 millones en el período 2020-2023, queda claro que Ramírez Rodríguez está desconectado con la gente, con sus gobernados, porque la realidad que vive hoy el municipio es muy distinta por los múltiples problemas que lo golpean.

Por esa razón, los cajiqueños y los medios reclaman del alcalde, al que se le intentó revocar el mandato hace unos meses por incumplir el Plan Municipal de Desarrollo y por el inconformismo ciudadano, las estrategias para enfrentar y resolver las preocupaciones que agobian día a día a cerca de 100.000 habitantes de la ‘Fortaleza de piedra’.

El listado de problemas, al que Ramírez Rodríguez parece mirar con displicencia, es largo y complejo: inseguridad rampante, urbanización desenfrenada, fallas en los servicios públicos básicos, desaseo, deterioro del inmobiliario público, proliferación de ventas ambulantes, parques tomados por pandillas, migrantes deambulando por las calles y movilidad desordenada.

La seguridad, que fue una de las banderas con las que llegó a gobernar Ramírez Rodríguez, es uno de los mayores reclamos al mandatario por parte de la ciudadanía, que hoy no solo se siente atemorizada, sino acorralada por la delincuencia común y las bandas criminales que han llegado a Cajicá a sembrar intranquilidad y miedo.

No menos preocupante es el problema de la acelerada urbanización de los terrenos del municipio, que ha generado un crecimiento desordenado, llevándose por delante el patrimonio arquitectónico e histórico del municipio, y dejando en evidencia la escasez en los servicios públicos domiciliarios para responder la demanda de nuevos habitantes.

Sus acciones como gobernante van en contravía de lo que está consignado en su propio Plan de Gobierno en el artículo 5º (Principios) sobre publicidad: “Las actuaciones de la Administración serán de público conocimiento y accesibles para todos los habitantes”. No atiende el clamor ciudadano y guarda silencio ante los interrogantes de la prensa.

Pese a las derrotas políticas que ha sufrido en el Concejo, Fabio Ramírez Rodríguez ha logrado la aprobación de algunos Acuerdos, entre ellos los que crean las secretarías de Seguridad, y Tránsito, Transporte y Movilidad, que están incluidas en el Plan de Desarrollo, y con las que se espera poner en marcha medidas para solucionar los problemas en estas materias.

Otros Acuerdos aprobados tienen que ver con la autorización de vigencias futuras y uno que llama mucho la atención de la ciudadanía: la asignación del salario del alcalde en $11.486.730, retroactivo al 1 de enero del 2022. Es el Acuerdo 03 del 19 de mayo de 2022, que también reajusta el salario del Personero Municipal de Cajicá en el mismo monto.

Seguramente Ramírez Rodríguez (conservador), elegido con escasos 11.500 votos, está haciendo “lo políticamente correcto”, pero de cara a este escenario, Cajicá necesita que el timonel del municipio se conecte con los habitantes para escucharlos y comunicarles lo que está haciendo, y en un acto de responsabilidad política cuente qué ha incumplido de su Plan de Gobierno.